martes, 1 de septiembre de 2020

Ramón Palomares / (5 poemas) Selección de Vuelta a casa




PREHISTORIA

 

Una antigua boca de mí sobre los cráneos de sus parientes muertos

y me llaman quejidos sombríos

escarbando ira y miedo.

Y aparece la muerte acuclillada

en su espejo tortuoso;

y desde el sentimiento aún confuso

que el gorila ni el tigre alcanzaran nunca en sus ciegos rugidos,

la luna del poema se expande

en el vivo fuego y el rudo balbuceo;

y el cielo en sus carbunclos

espanta visiones y destiempos

en el ardor de esa comida ronca

donde clarea la eternidad;

y así el poema asciende hacia otros soles

iluminando el sitio

en que la intimidad abre su inmensa oreja,

y se vuelca entre raptos y extravíos

ardiendo en universos cada vez más lejanos,

 

abriendo y entrañando

hacia las regiones no humanas

−Otras−

que sueñan sin embargo sueños mortales.



DESPERTAR

 

El animal rojizo

bañándose con aire nuevo,

estrenando su fuerza

va en el fulgor de ondulantes praderas.

Ningún acoso en el resonar de sus patas.

No ayer No mañana Sólo su imagen y bramido.

Perseguido de su gran esplendor,

sólo espacio para su hambre, pasto salvaje y viento.

Todavía no se ha inventado la muerte.

El infinito no se ha escapado todavía.

Tan sólo una gloriosa voluntad

Resplandece.

 


PRECIPICIO

 

Los rebaños en la parda meseta:

moscas sobre una hoja marchita.

Un pájaro

una aterida conversación de torcaces.

El alma: Añoranzas

El corazón: Ese oscuro cristal que brilla

y grita al fondo.

 


ARROYO

 

Tiene una carrera de cola de pájaro.

Pájaro Mosca

Colibrí largo

y baila y baila sobre el trébol.

Habla como el ala de una cigarra

Dice que es Páramo

Cielo verde

Copas …

Y se va.

 


TABACO

 

Sobre los parapetos, colgando de las trojas

la plumosa turba de aromas.

Es la purísima hilacha Varinas

Ya viene su humo azul

Ya sale su barco y ya se van sus torres

a nortes turbios y salones de juego

acunando el sueño de mujeres evanescentes.





Ramón Palomares (Trujillo, 7 de mayo de 1935 - Mérida, 4 de marzo de 2016)

Fue un poeta venezolano. En 1975 obtuvo el Premio Nacional de Literatura por su libro Adiós Escuque; en 2006 resulta ganador del primer Premio Internacional de Poesía Víctor Valera Mora; y en 2010 del Premio Iberoamericano de Literatura. Es uno de los más prolijos poetas venezolanos de la segunda mitad del siglo XX con la impronta de nuestra lengua vernácula.