martes, 5 de enero de 2021

Carmen Díaz Margarit / Autosirena

 



Autosirena

 

El plural del abanico

se resolvió en un único destino.

 

Resolví la leyenda de mi infancia

con una forma ajena y humana,

y a mis mayores debo mi amargura milenaria.

 

Nunca vieron turistas mis pestañas.

 

Con almendras fabrico pingüinos, collares.

Mis libros son atletas

y mi palabra antigua como la seda.

 

En un ataúd blanco

escondo una niña que es un arpa,

y tengo tanta sed de amor

que se estremecen cerezas

en los seres más extraños.

 

Mi alergia al espacio

y mi manicura siniestra

son la curiosidad de mi magia.

Me mantuve siempre libre

de la ternura azul de los leopardos.

 

Amé todas las entrañas marinas,

amé incluso seres fatuos

por si alguien tachaba de inmóviles mis pestañas.

 

 Desde entonces, un arpa da sombra a los senos en mayo.

 


Carmen Díaz Margarit (París, Francia -1961)

Es poeta, crítica y doctora en Filología Hispánica por la UCM. Concibió su obra poética como un quadrivio de los elementos naturales: a la tierra, la gacela; al mar, la sirena; al cielo, la alondra; y al fuego, la salamandra: Gacelas de la selva alucinada, finalista de Adonais en 1990, (1991); Perfil de sirenas, Premio Internacional de Poesía Barcarola en 1993, (1994); y Orlando o el desconcierto de las alondras, Ayuda a la Creación Literaria del Mº de Cultura en 1995 y finalista del Premio Gil de Biedma en 1998, (1999). El sueño de la salamandra ha sido también finalista del Premio Internacional de Poesía Miguel Hernández en 2019. Por delicados motivos, sostuvo casi dos décadas de silencio poético. El sigilo editorial salpicó como el Guadiana con Donde el amor inventa su infinito (2007). Es autora de una obra de teatro, El loco y su pelícano (2019). Su poesía ha sido traducida al inglés y al alemán.