todo es asunto de oxígeno
en cada beso
o en las palabras
el movimiento cesa
en el pequeño
pequeñísimo
triunfo del carbono
...
un mundo trabajado por la
desolación
una madre llora por su madre
siempre duelos condolencias
nunca suficientes los esfuerzos
la fiebre la ausencia
cuando partías tomé tu mano
me hice susurro para tus oídos
paciencia en la muerte incluso
el cuerpo en lo definitivo
no hay que contar los días
igual el fuego el horno la
quemadura
las rosas blancas junto a tus cenizas
…
siempre estamos en deuda
una lección para la cabeza
y el corazón
la vida se eleva sobre deudas impagables
como el aire que respiras
pequeñas cuentas que debes anotar
y agradecer
…
cuál nombre tiene la hornilla
la mascota de la casa
hermana fiel que transforma lo crudo en una mezcla de
sabores
constancia azul del fuego
mundo de cables
derrotados
los altos postes
siempre una tribu de aves vigila el paso silencioso
no tanto
la baja frecuencia de su sonido es la luz
alta tensión
dice el letrero
que todos ignoran
mientras la hornilla enrojece
…
en los sueños la bruja se sonríe
un dolor despierta
las vísceras retorcidas por la maldad
conjuras el mal trance
el difunto tiende la mano
alivia el miedo aleja las
nieblas
por segunda vez has visto su rostro
un fuego verde y oro rompe el cielo
…
vigilia de la rapiña
ahí se quedarán los libros
para los saqueadores
las prendas que amaste
aquello que no usaste porque
era muy bello
las cajitas los aretes los anillos
para los saqueadores
la silla, la mesa y tus pañoletas
tus fotos y tus secretos
tus datos los archivos tus claves
todo será arrasado
no por el tiempo sino por la violencia
entonces volverás a morir otra vez
en el comienzo
…
para visitar los vivos
también soñamos los muertos
en el mundo domado de las estrellas
damos pasos largos
con paciencia aguardamos
la oportunidad de un sueño
…
entre el cielo y la tierra se
mueven los cuerpos
las palabras se abren al secreto
y lo resguardan como grano de arena
atrapado por el nácar
bóveda iridiscente
para que regresen los sueños
asciendes como el humo
caes como la lluvia
entre el cielo y la tierra
el aire se hace denso
atravesado por la luz
apareces sin tocar y con permiso
sobre aromas de especies
…
un cielo de catástrofe
arañado por el desconsuelo
nadie puede detener esto
estamos ante la muerte
decretada
por el mal
no hay indiferencia en dejar morir
a niños a ancianos a todos
sacrificios vendidos a las armas
al poder
en esa mesa no tienes nombre
queda tu cuello degollado
ni siquiera hay hambre de sangre
la crueldad guía los pasos
…
los días fatales
se comieron nuestros arrebatos
los huesos quebrados bajo el sol
alimentando la burla de los guardias
aprendiendo nuevas hambres
en las caras impasibles despiadadas
mientras la voz resiste
estos días nos trajeron
no vergüenza
pero sí el temblor
temores del robo o del golpe
acá matan mujeres niños hombres
con saña a los ancianos
acá la piel se llena de ácaros silenciosos
se agrieta en la sequía
el espejo va mostrando el arte de carecer
oculto bajo la determinación
el dolor
la muerte sin comentarios
permanecen en los días fatales
…
aquí todos estamos retrasados
no en vano se ha jugado con el tiempo
media hora más media hora menos
y hemos perdido la cuenta
imposible volver a comenzar
la voluntad ha sido sometida
no decides sobre tus pequeños
íntimos actos
en el hogar invadido
aquí retrasados caminamos
con los colores perdidos
en un país gris
con el cielo oxidado
y hemos tenido que extender el mantel
de la condescendencia en la mesa
comer así sobre un tiempo arrebatado
aprender la compasión
…
presentimiento
una mujer todo lo inventa
todo está en lo que escucha y no le dicen
en lo que ve y no mira
donde no está tu voz ni tus palabras
no está tu cuerpo ni tú
una mujer ha visto sentido escuchado
lo que allí no está el rumor
de las alas el incendio del alma
desde la nebulosa se inventa en lo inexistente
bajo tu aliento y tus palabras
abre los ojos
sólo está la quimera
un último desaliento en los rincones del sueño
levanta los velos
habla nadie le cree
se arrodilla
te repite cuidadosa lo que le has dicho
lejos de esta realidad y de la tuya
una mujer te hace aparecer
…
mojada y desnuda
el tiempo en los cimientos
una casa entregada
para la dicha
mi cabeza ha encontrado reposo
mojada y desnuda
te dejo mis entrañas
haciendo del círculo
un camino que tus dedos trazan
la boca
maniatados en la lluvia
el cielo genital enrojece en el crepúsculo
para llorar
abrazados con fuerza
hemos tocado el camino último
una luz más blanca
nos nombra
tiritada bajo tus besos
el cielo se ha abierto
mojada y desnuda
en tus brazos
mis manos se abren mientras te nombro
…
lo súbito puede ser muy lento
gestándose en las vísceras por años
y en un prudente deseo de morir
y con un prudente deseo de vivir
siempre se quiere más tiempo
abundan los pretextos para permanecer
para querer un día más
gotea una hora de vida parece ser una oración
pero son rápidas las manos
de pulso certero
el hilo roto pende como una señal
que tardo en comprender
luego será el lugar fúnebre
para lamentos convencionales
viendo el fuego del horno
un viejo aparato
sueño de la incandescencia
a veces viajar tiene muchos requisitos
…
la sangre que me ama
se espesa dentro de mí
se lleva toda la luz
callada se ha vuelto pozo
agua estancada
los caminos cerrados desvían su rumbo
la sangre
avariciosa en su muerte
es un quebranto en el corazón
…
todo se mueve hacia la vida
enterramos todo aquello que amamos
enterramos hasta nuestras uñas
María Antonieta Flores (Caracas, Venezuela)
Poeta,
escritora, editora, profesora universitaria jubilada. Magister en Literatura
Latinoamericana. Ha publicado los poemarios: El señor de la muralla (1991), Canto
de Cacería (1995. Premio de Poesía de la I Bienal de Literatura Municipal
“Augusto Padrón” 1994), Presente que no
en ausencias (1995), Agar (1996),
criba de abril (1998), Los trabajos interminables (1998.
Mención Premio Municipal de Literatura 1999), índigo (2001. Premio Único del Primer Concurso Transgenérico de la
Fundación para la Cultura Urbana). Con Oscar Todtmann editores publica su más reciente
poemario los gozos del sueño en 2021.
Su poesía ha sido traducida al inglés, italiano, alemán, francés, portugués, rumano.
Ha sido, también, incluida en más de veinte antologías nacionales e internacionales.
Es la editora y fundadora de la revista de poesía digital el cautivo.