PERFIL DE SOLEDADES
I
Si alguien hubiera dicho:
la soledad se nutre de párpados
caídos,
de silencios dormidos en la noche
del ángel;
la soledad es una inválida
semilla,
heredad antigua, cadena y
mortaja…
Pero nadie lo dijo.
Y yo, que esperaba,
tuve que evadirme
por los cuatro puntos
amargos del viento.
II
Me sorprendo cercana de la noche,
en vano pregunto y llamo;
bajo un cielo de ruinas
contemplo mis manos
que se alargan como
interrogaciones
y veo, palpo, siento,
la soledad.
III
Quien quiera leer en mí
que baje los ojos hasta el musgo,
a la raíz misma del llanto,
donde se nutre y se dibuja
el perfil de la angustia.
Es inútil buscarme en el verde
árbol
que canta su pródigo verano,
su mediodía de pájaros
y la agilidad niña de una
esperanza.
IV
Soy silencio y sombra.
Presentida, pálida neblina de una
muerte,
siempre epidermis y tacto,
tan íntima y constante
que su voz expresa mis palabras,
y mis huellas son tan sólo el eco
de su propio paso.
V
De soledades estoy hecha,
vasija y contenido.
Llevo una voz sin sol
que en vano quiere gritar, en el
origen,
el color y la anchura del
desierto;
en sí misma se encierra y
despedaza
al intentar romper la cáscara del
mundo.
VI
Llego por subterráneas grutas
al intacto manantial del sueño.
Y he ahí que me fugo
de las manos que me oprimen;
intento la estatura del grito
y avanzo hacia mi sombra;
porque nadie sabe
que este silencio de sepulcros
es sólo un eco
de tormenta en la cumbre.
VII
Nunca había estado
más cerca de mi muerte.
—Presencia en la rosa,
sombra sobre el agua—
en mí sentida, cierta,
lenta nostalgia o angustia viva,
esperanza o desesperanza.
VIII
De nuevo, en mi deshabitado
mundo,
contemplo mis manos
que se alargan como
interrogaciones
y veo, palpo, siento
la soledad.
Si alguien me hubiera dicho …
Pero todos callaron.
Amparo Dávila, (Pinos, Zacatecas, 21 de febrero de 1923
- Ciudad de México, 18 de abril de 2020)1 fue una escritora mexicana. Obtuvo el
Premio Xavier Villaurrutia en 1977. A finales de 2015 se le otorgó la Medalla Bellas Artes en reconocimiento
a su trayectoria, y desde ese año
el gobierno de México convoca un
certamen nacional de cuento fantástico
con su nombre: el Premio Bellas Artes de Cuento Amparo Dávila.