lunes, 22 de febrero de 2021

Javier Cevallos / Piel

 



Piel

 

La contemplación del otro

es el umbral del placer.

 

Imaginar las formas y repetirlas hasta el hastío;

presentir gestos, gemidos,

arqueos, sudores, mordiscos,

lenguas que cierran párpados y, ávidas, los abren de nuevo;

intentar el susurro obsceno

que abre insospechadas grietas.

 

Labio apretado contra corva, dedos crispados.

Labio apretado contra talón.

 

Polvo que abrasa las comisuras,

polvo,

que se arrebola en volutas deseadas.

 

Palabra que no acierta

hallar el lugar propicio

y detener su letanía:

 

Mi amada es planicie inconmensurable...

 

Vano intento de mirar alrededor,

la palabra agoniza

corcoveando entre los pastizales,

inflamada de tanto deseo.

 

Triste condena la de codificar el mundo;

condenación para el que así ha hablado.

 

Oídos claudicantes y lengua victoriosa:

la distorsión gobierna mis pesares

haciéndolos discurso soberano

y pereza consuetudinaria.

 

Javier Cevallos (Quito, Ecuador -1976)

Editor de la revista de creación literaria Ourovourus. Ha publicado el poemario La ciudad que se devoró a sí misma. Su trabajo consta en Ciudad en verso: antología de nuevos poetas ecuatorianos.